Cielo y tierra se unen al final del horizonte,
como los cuerpos nuestros en medio de una oscuridad abundante de un cuarto (pero no menguante), cálido y solitario.
El sol se derrite sobre las montañas verdosas del mismo horizonte,
para después... solo esconderse.
Escucho una dulce melodía,
y mi corazón baila con ella
al unisono de mis pies.
Me equiboqué, era tu voz,
tan encantadora como ella misma,
tú misma.
Ahora llueve.
martes, 14 de abril de 2009
veintitres de octubre de dos mil ocho
HugoA. martes, 14 de abril de 2009
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3 Responses:
jajaja " que no es por la droga, que no es por ser buenos, es por hacer lo que nos sale de los huevos". pura inspiración caon. jaja, saludos vato, estate chido we.
jaja " que no es por la droga, que no es por ser buenos, es por hacer lo que nos sale de los huevos".
pura inspiracíon y vivencias caon jaja.
saludos pues, cuentame del taller, estate bien loco.
¿Por qué el título?
Cool ¨.¨
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